La Sentencia n.º 23931 del 24 de enero de 2023 representa una importante resolución de la Corte de Casación en materia de delito intentado y competencia territorial. Esta providencia, que se centra en los criterios de identificación del último acto dirigido a cometer un delito, ofrece puntos de reflexión fundamentales para los operadores del derecho y para cualquiera interesado en las dinámicas del derecho penal.
La Corte de Casación, con esta sentencia, declaró inadmisible el recurso, destacando que el último acto dirigido a cometer un delito intentado debe interpretarse en su dimensión naturalística. Esto significa que es necesario considerar el acto final en su intención de perpetración del delito, incluso si no se ha alcanzado el objetivo criminal. La sentencia subraya, por lo tanto, que no es relevante si el acto puede reconducirse a un delito autónomo, sino que es esencial que esté finalísticamente orientado a la comisión del delito en sí mismo.
Delito intentado - Último acto dirigido a cometer el delito - Identificación - Criterios - Configurabilidad de delito autónomo - Irrelevancia - Supuesto de hecho. En materia de competencia territorial relativa a delito intentado, el último acto dirigido a cometer el delito, al que es necesario hacer referencia ex art. 8, apartado 4, del Código de Procedimiento Penal, debe entenderse en su dimensión naturalística y en cuanto finalísticamente orientado a la perpetración del delito en relación con el cual la conducta no se ha consumado o el evento no se ha verificado, quedando indiferente la circunstancia de que sea abstractamente reconducible a una figura delictiva autónoma.
Esta sentencia tiene implicaciones significativas para la práctica judicial. En particular, aclara que los operadores del derecho deben prestar atención no solo al acto final, sino también a su finalidad. El análisis de la conducta debe realizarse con una visión global, considerando los elementos que caracterizan el intento de delito.
En conclusión, la Sentencia n.º 23931 de 2023 ofrece una clara interpretación de los criterios de competencia territorial en caso de delito intentado. Invita a reflexionar sobre la importancia de considerar la dimensión finalista de los actos y su conexión con el delito intentado. Este enfoque no solo enriquece la jurisprudencia, sino que también proporciona herramientas útiles para una correcta aplicación del derecho penal.