Sufrir un accidente mientras se viaja en autobús, tranvía u otro medio de transporte público es una experiencia que al daño físico une un profundo sentimiento de frustración. En estos momentos, es esencial ser consciente de que la ley protege de forma específica los derechos del pasajero. Comprender los mecanismos para obtener la justa indemnización es el primer paso para ver reconocidas sus razones. En calidad de abogado experto en indemnización por daños en Milán, el Abg. Marco Bianucci asiste a las personas que han sufrido lesiones a raíz de accidentes en medios de transporte público, proporcionando un apoyo legal dirigido a obtener la justa compensación por los daños sufridos.
La normativa italiana, en particular el artículo 1681 del Código Civil, establece un principio de responsabilidad presunta a cargo de la empresa de transporte (el llamado transportista). Esto significa que la empresa es considerada responsable por los daños sufridos por el pasajero durante el viaje, a menos que no logre demostrar haber adoptado todas las medidas idóneas para evitar el daño. Para el pasajero herido, la carga de la prueba se simplifica notablemente: es suficiente demostrar la existencia del contrato de transporte (generalmente mediante el billete o el abono) y el nexo causal entre el accidente ocurrido durante el viaje y el daño físico sufrido, documentado por informes médicos.
Será, por lo tanto, la empresa de transporte la que deberá probar que el accidente fue causado por un evento imprevisible e inevitable (el llamado 'caso fortuito'), por un hecho imputable a un tercero o por la conducta imprudente del propio pasajero. Esta inversión de la carga de la prueba representa una protección fundamental para quien sufre un accidente, pero su aplicación práctica requiere un análisis atento y una correcta formulación de la solicitud de indemnización desde las primeras fases.
El enfoque del Abg. Marco Bianucci, abogado experto en indemnización por daños en Milán, es metódico y está dirigido a proteger íntegramente los derechos del pasajero. Cada caso se gestiona a través de un camino estratégico que comienza con un análisis profundo de la dinámica del accidente y de la documentación médica. La fase inicial es crucial para recopilar todas las pruebas necesarias, como testimonios, actas de las autoridades intervinientes y, sobre todo, una evaluación médico-legal para cuantificar con precisión la magnitud del daño biológico (la lesión a la integridad psicofísica) y de cualquier otra partida de daño resarcible, como el daño moral y los gastos médicos incurridos.
Una vez definida la cuantía de la indemnización, el despacho inicia una interlocución con la compañía aseguradora de la empresa de transporte, gestionando la fase de negociación extrajudicial con el objetivo de alcanzar un acuerdo equitativo en un plazo razonable. En caso de que la oferta indemnizatoria no fuera congruente o en caso de impugnaciones sobre la responsabilidad, el Abg. Marco Bianucci asiste al cliente en la acción legal necesaria para obtener en sede judicial el pleno reconocimiento de sus derechos.
Es fundamental actuar con prontitud. Si es posible, avise inmediatamente al conductor, hágase identificar y recopile los datos de posibles testigos. Acuda a la sala de urgencias más cercana para que se registren las lesiones sufridas, aunque le parezcan leves. Conserve con cuidado el título de viaje, que constituye la prueba del contrato de transporte, y toda la documentación médica posterior.
El derecho a la indemnización por daños derivados de un accidente de tráfico, incluidos los de medios de transporte público, prescribe generalmente en dos años desde el día en que se produjo el accidente. Sin embargo, existen excepciones y circunstancias que pueden modificar estos plazos. Por este motivo, es aconsejable consultar a un abogado lo antes posible para no arriesgarse a perder su derecho.
La indemnización tiene como objetivo compensar todos los perjuicios sufridos. Se distingue principalmente entre el daño no patrimonial, que incluye el daño biológico (lesión física y psíquica), el daño moral (el sufrimiento interior) y el daño existencial (empeoramiento de la calidad de vida), y el daño patrimonial, que comprende los gastos médicos incurridos y el lucro cesante debido a la imposibilidad de trabajar (daño por incapacidad laboral).
Si ha sufrido un accidente mientras viajaba en un medio de transporte público en Milán, es fundamental conocer y hacer valer sus derechos. Enfrentar solo los complejos procedimientos de indemnización puede ser difícil y llevar a obtener una liquidación inferior a la debida. La asistencia de un abogado experto en indemnización por daños garantiza una gestión profesional y estratégica de su solicitud. Contacte al Despacho de Abogados Bianucci para una evaluación clara y profunda de su situación y para definir el mejor camino para obtener la justa indemnización.