La reciente sentencia n.º 13379, de 14 de febrero de 2024, depositada el 3 de abril de 2024, ha suscitado un amplio debate entre los operadores jurídicos. El Tribunal de Casación, al abordar el tema de la renovación de la instrucción en apelación, ha afirmado principios fundamentales que protegen los derechos de las partes en el proceso penal, en particular en el caso de una apreciación diferente de las declaraciones de peritos o consultores técnicos.
La renovación de la instrucción del juicio oral es un instituto jurídico de gran importancia, ya que garantiza que el juez, en el momento de tomar una decisión, pueda valerse de todas las pruebas necesarias para una evaluación correcta. En particular, la sentencia en cuestión subraya que, si el juez en apelación realiza una apreciación diferente de las pruebas decisivas, está obligado a disponer la renovación de la instrucción. Este principio es fundamental para garantizar la corrección del proceso y el respeto del derecho a la defensa.
Apreciación diferente de las declaraciones prestadas en el juicio oral por el consultor técnico o el perito - Reforma de la sentencia absolutoria - Obligación de renovación de la instrucción del juicio oral - Existencia - Condiciones. En materia de procedimiento en apelación, el juez que llega a una decisión de condena, apreciando de forma diferente las declaraciones del juicio oral prestadas por un perito o un consultor técnico, está obligado, en caso de que se trate de pruebas decisivas, a la renovación de la instrucción del juicio oral mediante el interrogatorio del mencionado perito o consultor.
Las implicaciones de la sentencia n.º 13379 de 2024 se extienden mucho más allá del caso específico. Establece un punto de referencia para futuros procedimientos en apelación, ya que aclara las condiciones en las que se hace necesaria la renovación de la instrucción. Esto implica:
En este contexto, la sentencia sirve de advertencia a los jueces, para que consideren con la máxima atención las declaraciones de los peritos y consultores, evitando decisiones que puedan parecer arbitrarias o unilaterales.
En conclusión, la sentencia n.º 13379 de 2024 representa un avance significativo en la protección de los derechos de las partes en un proceso penal. Subraya la importancia de la renovación de la instrucción en apelación como garantía de un juicio justo. Los operadores jurídicos deben tener presente este principio para garantizar que cada decisión esté respaldada por una adecuada evaluación de las pruebas, protegiendo así los derechos fundamentales de los imputados y asegurando la corrección de todo el sistema jurídico.