Sufrir un daño en un bien de su propiedad, ya sea un vehículo, un inmueble o un objeto de valor, es una experiencia frustrante que genera incertidumbre y preocupación. Además del inconveniente inmediato, surgen preguntas complejas sobre cómo obtener una justa compensación por la pérdida económica sufrida. La indemnización por daños materiales no es un proceso automático; requiere una comprensión clara del marco normativo y una acción dirigida para hacer valer sus derechos. En estas circunstancias, la intervención de un abogado experto en indemnización por daños en Milán, como el Dr. Marco Bianucci, es fundamental para definir una estrategia eficaz y navegar correctamente las complejidades legales y burocráticas.
El fundamento de la indemnización por daños en Italia es el artículo 2043 del Código Civil, que establece el principio según el cual “cualquier hecho doloso o culposo, que cause a otro un daño injusto, obliga a quien ha cometido el hecho a indemnizar el daño”. El daño material se divide principalmente en dos categorías. La primera es el daño emergente, que representa la pérdida económica directa e inmediata sufrida por el perjudicado, como los costes de reparación de un vehículo o un inmueble. La segunda es el lucro cesante, es decir, la ganancia dejada de percibir derivada del daño, como la pérdida de ingresos para un profesional que no puede utilizar su equipo dañado. Para obtener la indemnización, es esencial demostrar el nexo de causalidad, es decir, el vínculo directo entre la acción ilícita del tercero y el daño sufrido.
El enfoque del Dr. Marco Bianucci, abogado con consolidada experiencia en indemnización por daños en Milán, es metódico y orientado al resultado. Cada caso comienza con un análisis exhaustivo para evaluar la fundatez de la pretensión indemnizatoria y la solidez de las pruebas disponibles. La estrategia se articula en varias fases, personalizadas en función de las especificidades de la situación. En primer lugar, se procede a la cuantificación precisa del daño, recurriendo, si es necesario, a peritos y consultores técnicos para una estimación objetiva. Posteriormente, se inicia la fase extrajudicial, enviando una solicitud formal de indemnización a la contraparte o a su compañía de seguros. El objetivo es alcanzar un acuerdo equitativo sin tener que recurrir al tribunal. En caso de que la negociación no conduzca a un resultado satisfactorio, el despacho asiste al cliente en la acción judicial, cuidando cada aspecto del litigio para tutelar plenamente sus derechos.
El cálculo del daño material se basa en criterios objetivos. Para el daño emergente, se consideran facturas de reparación, presupuestos, peritajes técnicos y el valor de mercado del bien dañado antes del evento. Para el lucro cesante, la evaluación es más compleja y requiere la demostración de la ganancia dejada de percibir a través de documentación fiscal, contratos perdidos u otras pruebas concretas de los ingresos que se habrían percibido sin el daño.
Los plazos de prescripción varían según la naturaleza del daño. La regla general para la indemnización por hecho ilícito es de cinco años a partir del día en que se produjo el hecho. Sin embargo, para los daños derivados de la circulación de vehículos, el plazo se reduce a dos años. Es fundamental actuar con prontitud para no perder el derecho a la indemnización.
Es crucial recopilar inmediatamente todas las pruebas posibles. Fotografiar o filmar los daños desde diferentes ángulos, obtener los datos de posibles testigos, conservar toda la documentación útil (como presupuestos, facturas o actas de las autoridades) y, si es posible, no alterar el estado de los lugares antes de una evaluación técnica. Una documentación completa es la base para una solicitud de indemnización sólida.
No, no siempre. Muchas controversias se resuelven por vía extrajudicial, a través de una negociación entre las partes, a menudo con la asistencia de sus respectivos abogados y de las compañías de seguros. La acción legal en juicio solo se vuelve necesaria cuando no es posible alcanzar un acuerdo satisfactorio para el perjudicado.
Afrontar una solicitud de indemnización por daños materiales requiere competencia y una estrategia clara. Confiar en un profesional permite evitar errores procesales y maximizar las posibilidades de obtener la justa compensación. Si ha sufrido un daño en sus bienes y desea comprender cuáles son sus derechos, puede contactar con el Despacho de Abogados Bianucci. El Dr. Marco Bianucci, en calidad de abogado experto en indemnización por daños, proporcionará una evaluación preliminar de su caso, ilustrando con transparencia las acciones más eficaces a emprender.