La reciente sentencia del Tribunal de Casación n.º 9442 del 9 de abril de 2024 aborda un tema crucial en el derecho de familia: la coparentalidad y sus implicaciones legales. En particular, la decisión se centra en las modalidades de contacto y visita de los hijos menores, estableciendo que las restricciones que excluyen las pernoctaciones por parte del progenitor no conviviente pueden ser recurridas. Esta sentencia ofrece reflexiones significativas tanto para los juristas como para las familias en situaciones de separación.
La coparentalidad es un principio fundamental consagrado en el Convenio Europeo de Derechos Humanos (art. 8), que protege el derecho a la vida familiar. Según el Tribunal, las resoluciones que limitan la posibilidad de pernoctación para el progenitor no conviviente no solo restringen su derecho a participar activamente en la vida del hijo, sino que también vulneran los principios de protección de la familia. La sentencia n.º 9442 establece que tales resoluciones son recurribles en casación cuando puedan lesionar el derecho a la vida familiar.
POTESTAD PARENTAL En general. En materia de coparentalidad, las resoluciones judiciales que, a conclusión del juicio de revisión de las condiciones de custodia, estatuyan, en vía exclusiva o adicional, sobre las modalidades de contacto y visita de los hijos menores, excluyendo las pernoctaciones (y, por tanto, no permitiendo al progenitor no conviviente con el hijo desempeñar plenamente sus funciones de cuidado, educación, instrucción, asistencia material y moral) son recurribles en casación si imponen restricciones susceptibles de lesionar, en su prolongación en el tiempo, el derecho fundamental a la vida familiar consagrado en el art. 8 del CEDH.
La sentencia n.º 9442 de 2024 subraya la importancia de la coparentalidad y la protección de los derechos del progenitor no conviviente. Los puntos destacados incluyen:
Estas consideraciones evidencian una creciente atención hacia el respeto de los derechos familiares y la necesidad de garantizar un equilibrio entre las necesidades parentales y el bienestar de los menores.
En conclusión, la sentencia n.º 9442 de 2024 representa un avance significativo en la tutela de la coparentalidad y los derechos de los progenitores no convivientes. Reafirma la importancia de la vida familiar y el derecho de los progenitores a ser parte activa en el crecimiento y la educación de sus hijos. Para los juristas y profesionales del sector, es fundamental tener en cuenta estas resoluciones en la práctica diaria, para que se puedan garantizar soluciones jurídicas que respeten los derechos de todos los sujetos implicados.